
martes, 22 de julio de 2008
Sorpréndete....

jueves, 26 de junio de 2008
Que vivir...

Que saber pedir no es regalarse.
Que regalarse, en definitiva, es no quererse.
Que para que nos quieran, debemos demostrar qué somos.
Que para que alguien sea, hay que ayudarlo.
Que ayudar es poder alentar y apoyar.
Que adular no es apoyar.
Que adular es tan pernicioso como dar vuelta la cara.
Que las cosas, cara a cara, son mas honestas.
Que nadie es más honesto porque no roba.
Que quien roba no es ladrón por placer.
Que cuando no hay placer en las cosas, no se está viviendo.
Que para sentir la vida, no hay que olvidarse de que existe la muerte.
Que se puede estar muerto en vida.
Que se siente con el cuerpo y con la mente.
Que con los oídos se escucha.
Que cuesta ser sensibles, y no herirse.
Que herirse no es desangrarse.
Que para no ser heridos, levantamos muros.
Que quien siembra muros no cosecha nada.
Que casi todos somos albañiles de muros.
Que seria mejor construir puentes...
Anónimo
"La Palabra se hizo carne y habitó entre nosotros.
Y nosotros hemos visto su gloria" (Jn 1;4)
Que Dios los bendiga!!!!
domingo, 18 de mayo de 2008
Lo mejor de ti...

lunes, 5 de mayo de 2008
Decálogo de la Vida
Soñar y Volar. Aunque nuestros pies toquen la tierra.
Llorar, cuando una nostalgia o tristeza te lo pida.
Perdonar tus propios tropiezos y lo de los demas.
Intentar todo lo que sientas latir en tu corazón y en tu alma.
Valorar los pequeños como los grandes regalos que te dé la vida.
Guardar cada enseñanza recibida, cada afecto compartido.
Descartar aquello que pueda hacerte daño o sepas que no tiene sentido.
Rescatar todo lo que te permita crecer y ser feliz en familia y como amigos.
Compartir, con todos los que te rodean, lo mejor de ti y sentir que vale la pena creer, soñar y vivir por un mundo mejor
sábado, 29 de marzo de 2008
Solo Vivir...

martes, 25 de marzo de 2008
Me gusta...
jueves, 20 de marzo de 2008
Con el Tiempo...
Que los besos no son contratos y los regalos no son promesas, y uno empieza a aceptar sus derrotas con la cabeza alta y los ojos abiertos, y uno aprende a construir todos sus caminos en el hoy, porque el terreno de mañana es demasiado inseguro para planes... y los futuros tienen una forma de caerse en la mitad. Y después de un tiempo uno aprende que si es demasiado, hasta el calor del sol quema.
Así que uno planta su propio jardín y decora su propia alma, en lugar de esperar a que alguien le traiga flores.
Y uno aprende que realmente puede aguantar, que uno realmente es fuerte, que uno realmente vale, y uno aprende y aprende... y con cada día uno aprende.
Con el tiempo aprendes que estar con alguien porque te ofrece un buen futuro significa que tarde o temprano querrás volver a tu pasado.
Con el tiempo comprendes que sólo quien es capaz de amarte con tus defectos, sin pretender cambiarte, puede brindarte toda la felicidad que deseas.
Con el tiempo te das cuenta de que si estás al lado de esa persona sólo por acompañar tu soledad, irremediablemente acabarás no deseando volver a verla.
Con el tiempo entiendes que los verdaderos amigos son contados, y que el que no lucha por ellos tarde o temprano se verá rodeado sólo de amistades falsas.
Con el tiempo aprendes que las palabras dichas en un momento de ira pueden seguir lastimando a quien heriste, durante toda la vida.
Con el tiempo aprendes que disculpar cualquiera lo hace, pero perdonar es sólo de almas grandes.
Con el tiempo comprendes que si has herido a un amigo duramente, muy probablemente la amistad jamás volverá a ser igual.
Con el tiempo te das cuenta que aunque seas feliz con tus amigos, algún día llorarás por aquellos que dejaste ir.
Con el tiempo te das cuenta de que cada experiencia vivida con cada persona es irrepetible.
Con el tiempo te das cuenta de que el que humilla o desprecia a un ser humano, tarde o temprano sufrirá las mismas humillaciones o desprecios multiplicados al cuadrado.
Con el tiempo comprendes que apresurar las cosas o forzarlas a que pasen ocasionará que al final no sean como esperabas.
Con el tiempo te das cuenta de que en realidad lo mejor no era el futuro, sino el momento que estabas viviendo justo en ese instante.
Con el tiempo verás que aunque seas feliz con los que están a tu lado, añorarás terriblemente a los que ayer estaban contigo y ahora se han marchado.
Con el tiempo aprenderás que intentar perdonar o pedir perdón, decir que amas, decir que extrañas, decir que necesitas, decir que quieres ser amigo, ante una tumba, ya no tiene ningún sentido.
Pero desafortunadamente, solo con el tiempo...
Jorge Luis Borges